Las carillas laminadas son un tipo de revestimiento dental que se utiliza para cubrir la superficie frontal de los dientes. Están hechas de porcelana y tienen un espesor de aproximadamente 0.7 mm. Debido a su grosor, son eficaces para cubrir defectos y corregir casi cualquier irregularidad dental, lo que las convierte en una opción popular para transformar la sonrisa de una persona.
El procedimiento para las carillas laminadas comienza con una evaluación dental para asegurarse de que tus dientes están en buenas condiciones antes de comenzar el tratamiento. Después, se toman impresiones de tus dientes para crear carillas temporales y para diseñar la sonrisa perfecta para ti.
El siguiente paso es limar tus dientes para que las carillas puedan encajar de manera natural en tu boca. Si tus carillas no están listas, se te colocarán temporales. Una vez que tus carillas laminadas estén listas, se cementarán en tus dientes y se curarán con una luz azul.
Las carillas laminadas son una solución efectiva para mejorar la apariencia estética de tus dientes al cubrir pigmentación severa, apilamiento moderado, dientes desgastados, astillados y espacios.
Para fijar las carillas, el odontólogo puede retirar una pequeña capa de tejido dental de tus dientes, lo que es esencial para hacer espacio para las carillas. Si se instalan correctamente, las carillas laminadas deberían verse muy naturales.
No es necesario administrar anestesia para el procedimiento, pero si deseas estar sedado por cualquier motivo, los médicos pueden apoyarte según tus preferencias de sedación para garantizar tu comodidad.
Las carillas laminadas pueden durar hasta 15-20 años si se cuidan adecuadamente. Es importante tener en cuenta que aunque las carillas no son tejido orgánico, todavía tienes tejido dental vivo debajo y alrededor de ellas. La caries y la inflamación debido a una higiene dental deficiente pueden afectar la durabilidad de las carillas. Por lo tanto, se recomienda cepillarse los dientes diariamente, usar hilo dental y enjuague bucal, y visitar al dentista regularmente para detectar cualquier problema a tiempo. También se debe evitar usar los dientes como herramientas y comer alimentos y bebidas que manchen los dientes para prolongar la duración de las carillas.
